Kriya Yoga y Vida Divina

Kriya Yoga y Vida Divina

Kriya Yoga y Vida Divina es posible, a través de una práctica de interiorización, informal, sencilla, y simple de realizar en un entorno familiar y social.

Kriya Yoga y Vida Divina

¿Qué es una Vida Divina?

Podemos acercamos a la comprensión de este concepto desde la etimología sánscrita, Divya Jivana, «Vida Divina», encontrando un significado sumamente profundo y espiritual.

Divya, «divino». Proviene de la raíz sánscrita div, significa akasha o chicakasha , «espacio o cielo».

Jivana, significa «vida».

Vida Divina se refiere a hacer consciente la presencia del Ser, Purusha, mientras habitamos o encarnamos la materia, Prakriti, es decir mientras vivimos.

La manifestación del Universo, es la expresión creadora, sostenedora y transformadora de la Divinidad. En cada Ser coexisten dos aspectos divinos: Purusha (Consciencia, lo Inmanifiesto) y Prakriti (Naturaleza, lo manifiesto). Ambos, Purusha y Prakriti, son parte del mismo Principio Divino. Perteneciendo las modificaciones o cualidades de la materia, Tattwa y Guna también a la Divinidad.

¿Por lo que, dónde no hay Divinidad? ¿Si la Divinidad lo impregna Todo?

“Antes de la creación nirguna brahma paramatma (el Ser supremo sin atributos) pensó, ‘Yo no permaneceré más en nirguna (sin atributos). Yo seré muchos. Yo asumiré la imagen del infinito. Yo me transformaré en el mundo viviente”.

Taittiriya Upanishad (2:6:1)

La Divinidad  diseñó minuciosamente la creación. Creó el microcosmos y el macrocosmo, insuflando vida a cada Ser de Su creación, conservando infinitud y perfección en cada uno de ellos. De lo cual se desprende, que ya somos divinos, solo hay que recordarlo, y vivir desde esa consciencia.

¿Cómo el kriya Yoga promueve una Vida Divina?

El Kriya Yoga y Vida Divina, se hace posible, a través de una práctica de interiorización, informal, (no ritualista ni dogmática), sencilla y simple de realizar en un entorno familiar y social. Permite la aceleración de la evolución humana, en desarrollo integral, a nivel denso, sutil y espiritual, tanto en lo individual como colectivo.

Lahiri Baba enseño el Kriya Yoga, para promover la Vida Divina en todos los seres humanos, superando las limitaciones personales, familiares, sociales y culturales.

La práctica de Kriya Yoga, permite tomar consciencia del Poder Divino de la respiración. Ser testigo neutro de .la respiración divina a través de uno, observador sin expectativa de Prana Shakti.

La respiración es vida y es poder. La respiración sostiene a la vida. La respiración es el apoyo para la creación entera.  La respiración es emanada y percibida por la Divinidad.

Para los practicantes de Kriya Yoga, el Dharma más elevado es realizar la respiración divina, es decir, hacer consciente su origen, percibir a Dios respirando a través de Dios. Y el karma supremo, ofrendar cada respiración a su fuente, a la Divinidad misma.

Es necesario para ello, aprender la técnica adecuada y practicar con la supervisión de un profesor empoderado. Así poder lograr, calma, quietud, e inmovilidad de la respiración, y percibir a Dios en uno mismo. Con el control de la respiración uno realiza que el Atma como Prana Krishna o Prana Shakti, es la esencia de la Divinidad omnipresente.

Kriya Yoga y Vida Divina es posible, tomando refugio en el Atma. Con la permanente realización de Prana Krishna como el único hacedor de todas las actividades, sentimientos y pensamientos, surge el estado de Rajarshi Janaka.

El practicante puede estar en el mundo, permaneciendo compasivamente no apegado. Permite que los aspectos denso, sutil y causal, estén a disposición del Atma, siendo esto la trascendencia de las búsquedas, de todos los senderos.

El Sadhaka realiza lo que se describe en el Kena Upanishad (2:4): “Quien percibe la Divinidad en cada pensamiento y disposición alcanza la inmortalidad. A través del esfuerzo se alcanza el poder y a través del autoconocimiento uno realiza la Divinidad.

Trascendiendo todas las búsquedas

Kriya Yoga y Vida Divina, favorece el trascender todas las búsquedas.

Más allá de la condición familiar, social, cultural, religiosa o filosófica, todos los seres humanos son capaces de percibir a través de los cinco sentidos, de accionar a través de los cinco órganos de acción, de sentir o pensar, porque el Atma mora en ellos a partir de la respiración.

La comprensión de que el Atma rige el aliento de vida o respiración, es la trascendencia de todas las búsquedas. Esta realización proporciona paz y felicidad reales. Darse cuenta de que el Atma obra, siente y piensa, y es el que inhala y exhala a través de los Tres Cuerpos del Ser, es encontrar el camino de regreso a casa.

Finalmente como dice el Taittiriya Upanishad (2:5:1):“Todos los seres divinos están adorando a Uno y mayor, con el conocimiento adecuado”.

Significa que en cada ser humano hay cinco aspectos divinos en los sentidos: Shiva, Vishnu, Surya, Shakti y Ganesha. El Señor Shiva está en el sonido del oído; el Señor Vishnu en el tacto de la piel; el Señor Surya, el Sol, en la forma o belleza que perciben los ojos; la Madre Shakti, la Madre Divina en el sabor de la lengua; y el Señor Ganesha en el olor de la nariz.

Si jnana swarup, vijnana swarup, y prajnana swarup (el Atma en la forma de sabiduría, conocimiento y super consciencia) no reside en el cuerpo humano y no es expresada por medio de la respiración, entonces las cinco deidades que presiden no pueden estar activas.

Tarde o temprano, la búsqueda espiritual, llevará a trascender a los aspectos parciales de la Divinidad, alcanzando la consciencia de Prana Shakti, común en cada uno de ellos.

Kriya yoga y Vida Divina en lo cotidiano es realizable, más allá de aparentes diferencias en las búsquedas.

¿Cómo alcanzarlo?

Si no eres iniciado aún, puedes iniciarte en la Próxima Iniciación en Kriya Yoga, e integrarte a las clases prácticas y de estudio, en preparación para el programa.

Si ya eres iniciado en nuestra tradición, renovamos la invitación a practicar de manera individual y grupal.

 
Créditos

Este artículo fue inspirado en una conferencia que realizó Paramahamsa Hariharananda en la Sociedad de la Vida Divina, Cuttack en 1974. La transcripción es uno de los capítulos de su libro «la Esencia del Kriya Yoga».

 
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